Detuvieron al líder de una secta de La Matanza que adoraba al dios Krishna acusado de esclavizar a sus fieles. El templo Abba Krishna de la zona de 20 de Junio fue allanado por la Policía Federal tras una denuncia de un testigo de identidad reservada.
El templo de la organización Abba Krishna está ubicado en una zona de campos del partido bonaerense de La Matanza, en el límite con Merlo y funcionaba según trascendió desde 2017. Quiénes la llevaban adelante adoraban al dios hindú Krishna, al cual le rendían culto con cantos de mantras, cantos congregacionales y charlas sobre filosofía espiritual y religión en sus programas de prédica para los domingos. Una gran imagen de Krishna de casi un metro y medio de alto estaba emplazada en el centro del templo, donde los fieles bailaban y cantaban para luego salir en procesiones barriales. El término “abba” significa padre en arameo.
La organización tenía una gran convocatoria dado que sus reuniones atraía a decenas de fieles. Cinco miembros de su cúpula fueron arrestados por la división Trata de Personas de la Policía Federal, en una causa bajo la firma del Juzgado Federal N°2 de Morón a cargo de Jorge Rodríguez.
El caso salió a la luz debido a la denuncia de una testigo de identidad reservada. El líder del culto, Aldo F., de 66 años, fue uno de los detenidos y está acusado de convertir en esclavos a sus fieles, de alejarlos de sus familias y de despojarlos de sus bienes.
La policía llegó el fin de semana pasado al templo ubicado en la calle Rico para allanar el lugar, allí encontraron a 12 fieles, que fueron entrevistadas por el Programa Nacional de Rescate de Víctimas. También se encontró dinero, 126 mil pesos y 500 dólares, así como un teléfono que podrá ser peritado.
Su líder fue arrestado en una propiedad aledaña al templo y tenía en su poder más de 300 mil pesos. Posteriormente se realizaron allanamientos en la zona de Pontevedra, partido de Merlo, que concluyó con otros tres arrestados.
Según fuentes policiales, esos fieles eran hombres y mujeres vulnerables, con posibles problemas psicológicos y situaciones familiares inestables, que se volvían conflictivos en otros cultos Krishna en Capital y el conurbano. Aprovechándose de estas situaciones la organización los absorbía y comenzaba a ejercer un control sobre ellos, con un presunto régimen de reducción a la servidumbre.
